Dorada busca entornos deprimentes para su próxima campaña

La campaña veraniega de la cerveza Dorada ha levantado este año críticas entre algunos usuarios, amplificadas, cómo no, por las redes sociales. En concreto, muchos consumidores se han mostrado cansados de los tópicos explotados en este tipo de publicidad, en la que se asocia a Canarias con sol, playa, fiesta y un ritmo de vida despreocupado y en exceso tranquilo. Se quejan de que se perpetúan estereotipos y se da la espalda a la dura realidad social que vive el Archipiélago.

Esta creciente impopularidad apenas afectará a las ventas de esta querida cerveza, pero, consciente de la necesidad de proteger la imagen de marca, el departamento de marketing de la compañía diseña ya una próxima campaña ambientada en los entornos más deprimentes de las Islas. Amador Fuentes, portavoz de Dorada, explica que «efectivamente, hemos estado ajenos a esos espacios en los que Canarias da bajona, centrados sólo en la playa, los chiringuitos y la alegría de vivir, y eso ha sido injusto, porque nuestros consumidores están en todos lados y no sólo se toman una cerveza para celebrar la vida sino también para evadirse de ella porque les resulta insoportable y dolorosa».

Fuentes desvela que ya se está empezando con la localización de emplazamientos. «Un equipo de la productora está recorriendo barrancos para ver en cuál hay más escombros y neveras, que eso da mucha pena, y otro se ha infiltrado en bares del barrio de La Salud en Santa Cruz para pulsar el estado del paisanaje», señala. No se descarta patrocinar alguna de las reuniones para un posible pacto de gobierno entre CC y PP, «porque también están resultando bastante tristes».

Para no perder el carácter veraniego, también se rodarán spots en núcleos de autoconstrucción de la costa, con especial preferencia por los espacios protegidos. Dorada espera así desactivar las críticas y mostrar su cara más sensible ante la sociedad canaria.

Rogelio Botanz prestará su música a esta campaña.