Dos turistas que llegaron por error a Güímar permanecen secuestrados por el Ayuntamiento

Klaus Schmidt y Otto Albach fueron captados por las cámaras de la Televisión Canaria momentos antes de ser raptados por el Ayuntamiento

Klaus Schmidt y Otto Albach, dos turistas alemanes procedentes de Bremen, permanecen secuestrados por el Ayuntamiento de Güímar desde que el pasado fin de semana recalaran por error en este municipio y asistieran a la romería en honor a Nuestra Señora de El Rosario. La alcaldesa, Luisi Castro, no ha revelado aún en qué fecha serán liberados y devueltos a sus familias, pero ha asegurado a los medios que están bien y que no les pasará nada si colaboran en su plan de impulso turístico de la localidad.

Schmidt y Albach llevaban unos cinco días en la Isla cuando decidieron subir al Teide por Arafo. Tras equivocarse de salida en la TF-1, acabaron llegando al casco de Güímar, donde se encontraron con la romería. Atraídos por esta muestra de tipismo, que les resultaba novedosa ya que nunca habían asistido a una, decidieron quedarse a pasar el día en el municipio. Pronto se extendió entre los lugareños la noticia de que dos alemanes estaban en Güímar y, tras llegar a oídos de la alcaldesa, ésta ordenó a la Policía Local que los escoltara y no se separara de ellos. Y así sigue siendo hasta el día de hoy. Ambos turistas se están alojando en la sede del Consistorio y se les ha provisto de ropa de un comercio local.

Luisi Castro explica que «hace años que no se veían alemanes por Güímar, así que es una ocasión histórica que no podemos dejar pasar para enseñarles lo mejor de nuestro municipio y que sean los embajadores que necesitamos para dar a conocer el nombre de Güímar por Alemania». Schmidt y Albach han visitado ya el Puertito, Agache, Fátima y Chacona, con exhaustivas explicaciones por parte del cronista oficial. También han mantenido una reunión de tres horas con el empresario Andrés Alonso, quien les ha detallado su proyecto de parque temático Mimiland y les ha preguntado también si en Bremen hay reserva de suelo para uso recreativo y si allí se ponen pegas a los jóvenes empresarios, por si fuese preciso cambiar su iniciativa de ubicación.

Los dos turistas confían en poder regresar pronto a Alemania, si bien la alcaldesa ya les ha advertido que «sin patearse el malpaís no se van a ir de aquí, y luego a hablar bien de Güímar; un técnico del Ayuntamiento se desplazará a Bremen con ellos para vigilar lo que van contando».