El aumento de la seguridad lleva al Ayuntamiento de Santa Cruz a suspender el Carnaval

No obstante la suspensión, el Carnaval se desarrollará con total normalidad

El aumento de las medidas de seguridad en torno al Carnaval de Santa Cruz han conducido al Ayuntamiento a la adopción de una medida drástica pero efectiva, y en la mañana de hoy el alcalde José Manuel Bermúdez ha firmado el decreto según el cual se suspende la fiesta para garantizar la integridad y seguridad de todos los carnavaleros. Los actos programados continuarán tal cual figuran en la agenda municipal, pero se exigirá a los participantes que se enfunden un traje de plástico de burbujas antes de tomar parte, «a fin de evitar males mayores», según aclaran desde alcaldía.

El Ayuntamiento de Santa Cruz admite que barajó obligar a todos los carnavaleros que desearan participar en los bailes en la calle a disfrazarse de persona a la que se le ha parado el coche en el arcén de la autopista, con sus correspondientes chalecos reflectantes, o de muñecos de Michelin, pero se descartó «porque no daba tiempo a la población a organizarse y temimos un desabastecimiento de chalecos y neumáticos». Se proponen alternativas como las celebraciones en casa o la introspección carnavalera, «en la que cada uno examina para sí, al ritmo del pachangueo más actual, cuál es su disfraz en la vida y por qué se esconde tras una máscara».

No obstante esta singular medida, desde el Consistorio aseguran que «el Carnaval transcurrirá con absoluta y jovial normalidad, como siempre, sólo que este año sí podremos decir que son los carnavales más seguros del mundo». Esta decisión, sin duda, formará parte del repertorio de las murgas en el concurso de 2015, si es que éste se celebra en directo y no a través de YouTube.