Investigan las apariciones de un carro fantasma en Los Rodeos
Desde hace cinco meses, un grupo investigadores canarios lleva recabando información y pruebas de uno de los fenómenos mas desconcertantes que se han vivido en la isla de Tenerife en los últimos tiempos: el carro fantasma de Los Rodeos.
El primer testimonio que se tiene es del pasado sábado 18 de Febrero cuando una pareja de jóvenes, volviendo de madrugada por la carretera general en dirección a La Laguna, se topó con este carro en la curva que hay justo antes del puente de Los Rodeos.
«Serían entre las 3:30 y las 4 de la madrugada» -señalaba Jonay P. H, conductor del vehículo- «Había niebla y al llegar a la curva nos pareció ver algo que se movía lentamente junto al arcén derecho. Cuando nos pusimos a su altura lo vimos perfectamente. Era un carro, de esos de supermercado, oscuro. Escuchamos perfectamente el chirriar de sus ruedas aunque no recuerdo haberlas visto al acercarnos. Nadie lo empujaba. Al situarnos a su lado, de repente, se lanzó a la calzada como queriendo embestir la puerta del acompañante. Yo pisé el acelerador y salimos de allí por patas».
Unos días mas tarde, medios especializados se hacían eco de unas presuntas psicofonías recogidas en un caserío de la zona durante la investigación del suceso antes narrado.
El autor de dichas grabaciones, Nicomedes Sánchez, conocido investigador paranormal, se encontraba entrevistando a vecinos del lugar cuando, al llegar a su casa y descargar la información grabada a su ordenador, descubrió un inquietante murmullo que aparecía de fondo cuando uno de los testigos hablaba sobre el carro.
«Al principio no llegaba a entenderlo» comentaba el propio Nicomedes a nuestro reportero de El Baifo Ilustrado, «pero gracias a un amigo que se descargó una versión de prueba del programa que usa la policía para procesar grabaciones telefónicas, conseguimos aislar ese murmullo e identificar lo que decía. Era una voz femenina que repetía dos veces la frase ‘vamos a puchita…. el carro barato’ Se me puso el vello de punta».
Nicomedes siguió investigando y actualmente tiene constancia de, al menos, cinco avistamientos mas.
«El patrón es el mismo: Noches de niebla, generalmente con pocos testigos y, siempre, en la misma curva del puente de Los Rodeos, a escasos metros de donde se encontraba el conocido supermercado Puchita.
Por los datos que tenemos creemos que se trata de una manifestación de una energía que el propio supermercado dejó impregnada en el lugar, y que es capaz de materializarse en ese carro, posiblemente barato, que se aparece vagando en pena».
Hasta el lugar se acercan cada fin de semana multitud de curiosos. Incluso ya se ha creado un grupo que defiende que el carro no es sino la representación de la vida vacía que llevamos los hombres. Este grupo sostiene que Puchita es la hija del creador del universo, que entristecida por el cierre del establecimiento que llevaba su nombre, se manifiesta para hacernos llegar su dolor. Actualmente se encuentran recaudando fondos para construir junto a la curva un pequeño monumento que la recuerde.
Cada domingo, organizan una peregrinación con carros hasta el lugar, ya que confían en que con ello volverá el esplendor y la bonanza a la zona.
Mientras tanto, los vecinos de la Carretera General tienen miedo. En noches de poca visibilidad, ni los perros guardianes se atreven a abandonar la protección de sus casetas, y hay quien asegura que si no sopla el viento, se puede oír en la distancia el frío sonido metálico de esas pequeñas rueditas que, tal vez, anden buscando un pasillo que ya no existe.