La patronal denuncia las trabas de la Cotmac virtual a la construcción en el Santa Cruz de Tenerife del Metaverso

«Los de siempre ya están de nuevo poniendo trabas al desarrollo de nuestra tierra virtual». Así de contundente se expresaba el presidente de MetaFepeco, el avatar de Óscar Izquierdo, en una rueda de prensa convocada en este espacio cibernético para denunciar las trabas que la Cotmac virtual, la Comisión de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente de las Islas, está poniendo para la construcción en las parcelas que ya están vendidas en el Metaverso de Santa Cruz de Tenerife, como informó recientemente Diario de Avisos.

El Izquierdo virtual señaló que «la actividad de los ciberemprendedores que estaban empezando a urbanizar parcelas en la capital ya se está viendo paralizada por los requisitos desmedidos que pone la Cotmac virtual y la carga burocrática que supone poner en marcha cualquier proyecto; nos arriesgamos a que estos empresarios se harten y se lleven sus iniciativas a otra ciudad de mentira en Internet, yo me pregunto si los políticos de esta Isla en su esfera virtual creen que nos podemos permitir esto». Espacios tan emblemáticos de Santa Cruz, como la calle Castillo o la avenida Marítima, ya han sido adquiridos y sus dueños pueden destinarlos a construir inmuebles virtuales o a ofrecer servicios de diferente índole pero, en cualquier caso, poco claros. Izquierdo apuntó que «desde MetaFepeco valoramos muy positivamente que nada más abrirse la posibilidad, los inversores virtuales canarios se hayan lanzado a comprar terrenos para edificar, nuestro sector económico más querido goza de bastante robustez, no podemos ver un solar sin imaginarlo urbanizado».

A esto se añaden las presiones de las organizaciones medioambientales, ya que según denuncia con crudeza, «en el metaverso no se puede mover un píxel sin que se manifiesten los metaecologistas».

A la espera de que se defina más claramente de qué va todo este asunto del metaverso santacrucero y qué rendimiento económico real, si es que alguno pudiera tener más allá de la especulación, no pocos chicharreros sueñan con una especie de nueva versión de Second Life que les permita visitar de nuevo lugares queridos de la memoria de la ciudad, como el antiguo Bar Capricho o Casa La Húngara.