Luis Morera presenta su serie de esculturas hechas con chorizo palmero

El creador, con su obra

Luis Morera es el artista que no para, un creador que lo mismo graba discos con Pitbull, como presenta toda una serie escultórica como la que estos días se exhibe en la sala O’Daly de la capital palmera, realizada con un material sorprendente: puro chorizo palmero. Morera resalta que «el día que me tomé libre para ser frívolo ha dado sus frutos, ha recargado mis pilas creativas, y producto de aquel fructífero asueto, hoy puedo presentar una obra de arte innovadora y sabrosa». Esta información ya fue adelantada en el último número de El Baifo Magacine.

Las obras, que se mueven entre el género abstracto y el realismo gastronómico, han sido creadas, según su autor, «para representar la vocación inmanente de La Palma, sea lo que sea que signifique eso, porque yo cuando me pongo a crear no me paro a buscar sentidos». La serie, titulada «Úntame el alma de sabor canario», se compone de veintiséis esculturas y dos cuadros, y un vigilante contratado ex profeso se encarga de que los visitantes no caigan en la tentación de llevar pan para comérselas.

Dentro de unos meses, y gracias a una subvención del programa Canarias Crea, del Gobierno autonómico, las esculturas iniciarán una gira por la península, y serán exhibidas en salas de arte y restaurantes selectos. Aurelio González, viceconsejero de Cultura, ha adelantado que el Gobierno se plantea adquirir varias de estas obras, «que ponen a Canarias como vanguardia y referente de la escultura comestible».