Nace el ‘Proyecto Mascahattan’
El sector insular de la construcción no descansa. Fieles a la máxima expresada en su momento por el empresario Antonio Plasencia (según la cual el constructor canario es emprendedor, porque euro que gana es euro que invierte en la compra de nuevos terrenos) los responsables de Cemento Investing, S. L. se han lanzado a la consecución de una iniciativa, llamada a dar impulso al sector en Tenerife: el ‘Proyecto Mascahattan’.
Masca como referente de la tricontinentalidad archipielágica
Puestos al habla con Salustiano Requejo, partícipe principal de la inversora, nos explica éste la filosofía del proyecto: convertir el caserío de Masca en una urbanización de lujo dirigida a alojar a inversores de todo el mundo.
La denominación ‘Mascahattan’ pasa por convertir la pedanía dependiente de Buenavista del Norte en una versión tinerfeña del célebre barrio neoyorquino. La idea surgió al comprobar en la Wikipedia que el caserío de Masca había sufrido un incendio en el año 2007, el cual había destruido una parte de las construcciones y la vegetación del lugar. Si a ello se une la lenta pero inexorable caída de la población del lugar –concluye don Salusiano- se llega a la conclusión de que algo hay que hacer para recuperar la zona y ganarla para la causa de la trincontinentalidad.
El proyecto pretende urbanizar esa comarca del Macizo de Teno, colmatando todos los barrancos y construyendo sobre ellos una gran urbanización de diez mega-rascacielos de ciento ochenta pisos. Dichas edificaciones estarían unidas por un metro circular subterráneo y un servicio de helicópteros (para cual, cada uno tendría su propio helipuerto en la cúspide). Cada rascacielos tendrá espacio para oficinas, apartamentos, restaurantes, franquicias de las más importantes empresas de todo el mundo y, en definitiva, todo lo que sus habitantes requieran para vivir sin salir de esta mini-mega-urbe de última generación.
Comunicación total
Para fomentar la llegada de inversiones del continente, Cemento Investing, S. L. ha proyectado también el tendido de cuatro líneas de tren-bala que unirían Mascahattan con los dos aeropuertos y los dos puertos. Todas ellas discurrirían atravesando el Parque Nacional del Teide bajo tierra hasta alcanzar las estribaciones de Teno.