Román Rodríguez toma la iniciativa para crear una Dirección General de la Metáfora

No pocos politólogos, alguno incluso de renombre, coinciden en señalar que cuando un Gobierno pierde el control del relato, comienza su declive. Para evitar que esto suceda, y alarmado por la deriva de Ángel Víctor Torres, el vicepresidente Román Rodríguez ha tomado la iniciativa y ha creado de forma urgente una Dirección General de la Metáfora, dependiente de la Consejería de Hacienda, desde donde se controlarán las metáforas y analogías utilizadas por los consejeros y cargos públicos y se darán pautas generales para los representantes públicos.

Esta decisión ha venido precipitada por la inopinada analogía que el presidente Torres hizo en los micrófonos de SER Las Palmas, según la cual la actual crisis económica, social y sanitaria se asemeja a una diarrea sorpresiva: «Lo que está pasando ahora mismo es como una diarrea, todos sabemos que cuando tenemos una diarrea la vamos a superar. Pero cuando la tienes la sufres (…) Estamos en una lamentable diarrea inesperada que nos está provocando un quebranto absoluto de todo el Estado del Bienestar, pero todo el mundo sabe que de ésta vamos a salir». Fuentes cercanas a Rodríguez señalan que «no es de recibo que en esta situación el propio presidente le diga a los canarios de una forma tan abrupta que estamos en la mierda, y que a saber ese grifo de mierda cuándo y cómo se va a cortar, y lo que es peor, que se van a quedar deshidratados y con una alarmante bajada de minerales». Quizás, apuntan estas mismas fuentes, hubiera sido más elegante hablar de una mayonesa salmonelosa o incluso de un exceso de legumbres, fastidioso pero absolutamente pasajero y sin consecuencias. De igual modo, lamentan que Torres perdiera la ocasión de presentar al Gobierno como «el Fortasec de izquierdas que va a detener ese molesto flujo de heces sin dejar a nadie atrás».

Se desconoce quién va a ocupar la Dirección General pero desde la Consejería han pedido ya el listado de los últimos veinte Premios Canarias de Comunicación entre los cuales, previsiblemente, se realizará un sorteo. Román Rodríguez habría dicho a sus allegados que se necesita a alguien que trabaje fina la metáfora, que sea didáctico y claro y que embellezca la gestión del Ejecutivo autónomo con alegorías cargadas de belleza y alejadas de la vulgaridad de un cuarto de baño, con lo cual parecen descartados los hermanos Rivero.