Stephen Hawking deja de cogerle el teléfono a Carlos Alonso

Stephen Hawking, en la presentación del Starmus III

Se enfría la relación entre Stephen Hawking y Tenerife después de que el brillante científico británico haya dejado de contestar al teléfono al presidente del Cabildo tinerfeño, Carlos Alonso; desde su entorno, aseguran que Hawking se empieza a sentir «un tanto saturado» de las continuas invitaciones y homenajes cursados por el político canario, y necesita descansar un poco para poder centrarse en su labor de investigación. Según estas mismas fuentes, el físico habría llegado al extremo de fingir ser un contestador automático.

Stephen Hawking asegura que «ser invitado al Starmus fue un honor, y acepté porque al fin y al cabo era un evento relacionado con la Ciencia y me apetecía darme un garbeo, aunque la verdad es que me prepararon una agenda agotadora«. Añade que «incluso la segunda invitación para estar este año porque me van a hacer un homenaje, pues me hace ilusión y digo que sí»; no obstante, relata que, a partir de ahí, las llamadas de Alonso empiezan a ser casi constantes: «que si te he propuesto para el Premio Canarias, que si no te dan el Nobel, pues tienes éste, luego que si quieres ir al PIT este año que va de dinosaurios, otro día que si tengo planes para la romería de Tegueste…». El científico lamenta que «yo así no puedo centrarme ni en los agujeros negros, ni en la materia oscura, ni en nada».

Hawking asegura que «yo a Carlos Alonso le tengo aprecio, no parece mal muchacho, pero a ver si corre un poco el aire». Por su parte, desde el Cabildo niegan que el presidente tuviera planes de llevar a Stephen Hawking a la Gala de la Reina del Carnaval de Santa Cruz ataviado con una fantasía, al tiempo que declinaban dar explicaciones sobre la reciente compra de varios kilos de purpurina, plumas, lentejuelas y telas de colores.