Conocido locutor deportivo, en crisis tras agotar todos los chistes sobre Choco Lozano

José Carmelo Castañazo, en una retransmisión fuera del Heliodoro.
José Carmelo Castañazo, en una retransmisión fuera del Heliodoro.

José Carmelo Castañazo, conocido locutor radiofónico de la isla de Tenerife que habitualmente retransmite los partidos del representativo insular, ha entrado en crisis, según informan fuentes de su emisora y de su entorno más cercano, tras haber agotado en seis jornadas de Liga y un partido de Copa, todos los chistes, chascarrillos y juegos de palabras con el apodo de Anthony «El Choco» Lozano, jugador hondureño fichado por el Club Deportivo Tenerife este verano y que se ha revelado como una de las grandes apuestas ofensivas del equipo de Raúl Agné.

«Éste sí que es un choco bueno, y no lo que se pesca en El Socorro», «ChocoKrispies le está dando energía al Tenerife», «antes me gustaban las chocolatinas pero ahora mi favorito es el Choco Latino», y otros chistes de similar jaez han salpicado de forma constante las retransmisiones de Castañazo desde el inicio de la Liga Adelante, hasta el punto de que en estos momentos su repertorio está totalmente consumido, y urge encontrar nuevas metáforas humorísticas para próximos partidos.

"Choco" Lozano, gran apuesta ofensiva para el fútbol y renovadora del humor en las ondas.
«Choco» Lozano, gran apuesta ofensiva para el fútbol y renovadora del humor en las ondas.

Según una persona muy cercana al locutor «ahora que el Choco está con la Selección de Honduras, José Carmelo se puede dar un respiro creativo y encerrarse a idear chistes; la ansiedad le puede porque desde que patentó lo de llamar a Nino ‘la ambulancia’ sabe que el público espera mucho de él, y ese nivel de exigencia a veces le sobrepasa». Esta misma fuente nos asegura que el locutor consulta con frecuencia la hemeroteca para encontrar inspiración en Altober, difunto colaborador del periódico El Día cuya sección «Tonterías para reflexionar» fue un filón de lo primero aunque menos de lo segundo.

Maruca Johnson

Incisiva ante la actualidad desde que el cardado empezó a destruir la capa de ozono. Discreta a la par que elegante.

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