El Cabildo empieza a admitir que Efraín Medina corriendo muy rápido es lo más cerca que Tenerife va a estar de un circuito de velocidad
El Circuito Insular del Motor es un viejo proyecto que lleva años dando tumbos en el Cabildo de Tenerife, zarandeado por continuos imprevistos y fiascos que han llevado a retrasarlo una y otra vez. En 2015 se adjudicó la obra a una sociedad italiana por un valor de 30 millones de euros, pero las cosas siguen más o menos igual; de hecho, dos años más tarde el Cabildo asumió las obras ante el incumplimiento de la empresa adjudicataria. Recientemente se ha sabido que el Cabildo no puede ejecutar el aval presentado por la empresa inicial. En resumen, después de muchos años de proyecto, del Circuito Insular del Motor sólo hay una foto del presidente colocando la primera piedra.
Toda esta serie de terribles infortunios y contratiempos ha llevado a la primera institución insular al pragmatismo más descarnado, y desde el área de Deportes reconocen haber tenido conversaciones con Carlos Alonso en las que se plantean alternativas very low cost para esta infraestructura. Según nos informa una fuente próxima al Consejo de Gobierno, «la primera alternativa es Efraín Medina corriendo muy deprisa por la parcela que íbamos a destinar al Circuito, aunque Aurelio Abreu con sus problemas judiciales también está cogiendo velocidad y es una opción que no hay que descartar; por otra parte, tenemos soluciones en mente de menor coste como un Scalextric gigante, cerrar la subida de Los Loros en Arafo ya sólo para moteros y gente con quads, o retirar los badenes o guardias tumbados de las carreteras de medianías». Añade esta fuente que «nuestra gente ha sabido improvisar circuitos de velocidad a lo largo de toda la Isla, y eso también hay que valorarlo».
Por su parte, las plataformas ciudadanas que demandan con insistencia un circuito de velocidad en Tenerife, a pesar de que la Isla presenta carencias y necesidades más urgentes y notorias, por ejemplo en infraestructuras sanitarias, educativas o hidráulicas, no terminan de fiarse de este último anuncio, por lo que amenazan con concentraciones en la puerta del Cabildo Insular, dando acelerones innecesarios a sus motos y quemando un combustible que debería ahorrarse.
