Lo que no se ha contado de la Conferencia de Presidentes de La Palma
Este fin de semana, La Palma ha congregado a todos los presidentes y presidentas de las Comunidades Autónomas en una histórica sesión de la Conferencia de Presidentes en el Museo Arqueológico Benahoarita de Los Llanos de Aridane, con la presencia de los Reyes, que participaron el día anterior en el homenaje al pueblo de La Palma. La cita ha dado para abundantes informaciones, y en este reportaje repasamos algunas anécdotas que han pasado desapercibidas en el resto de medios.
Interés urbanístico
Varios presidentes autonómicos se han interesado por la nueva ordenación urbanística del Valle de Aridane tras la erupción, preguntando a la alcaldesa de Los Llanos si era cierto lo de que se iba a poder construir en cualquier punto. Ante la respuesta afirmativa de Noelia García, algunos presidentes le afearon a Pedro Sánchez que no haya un volcán en cada comunidad para flexibilizar la normativa y estimular así la economía.
Reunión en un contenedor
El Gobierno de Canarias presionó hasta el último momento para celebrar la reunión en uno de los contenedores (o «viviendas modulares») reconvertidos en casas para los afectados del volcán, gesto con el que se habría dado un fenomenal golpe de efecto y se habría demostrado que son habitables y espaciosos, pero Moncloa y Zarzuela se mantuvieron inflexibles. Felipe VI, no obstante, mostró cierta curiosidad por esta solución habitacional, que Ángel Víctor Torres espera que visite de forma oficial pronto.
La demora de Miguel Ángel Revilla
El presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, llegó con retraso a la reunión, y posiblemente de amanecida, tras coincidir la noche anterior en un restaurante con el artista multidisciplinar Luis Morera y pasar la noche intercambiando ideas y canciones de sus respectivas tierras. Morera ya trabaja en un nuevo disco, «De Castro Urdiales a Tajogaite», donde fusiona los folklores cántabros y canarios. Revilla le ha obsequiado con varias cajas de chochitos y anchoas.
El protagonismo de Díaz Ayuso
La presidenta madrileña ha acaparado cámaras en la reunión, así como la atención de multitud de ciudadanos que se han topado con ella y le han pedido selfies y autógrafos. De hecho, una familia residente en la zona del Museo Arqueológico desplegó una pancarta a modo de bienvenida en la que podía leerse «Comunismo o Rapadura». Díaz Ayuso no entendió la referencia pero agradeció el entusiasmo.
Los temas ausentes
La invasión de Ucrania y sus profundas repercusiones a todos los niveles han centrado la reunión. Cuando se abordó el reparto de refugiados entre las diferentes Comunidades, el presidente Torres intentó meter la cuña de los inmigrantes africanos que permanecen retenidos en las Islas, pidiendo, desde la humildad, la solidaridad del resto de regiones. Según fuentes internas, Pedro Sánchez cortó en seco la intervención y se produjo el siguiente diálogo:
-Eso ahora no toca, Ángel Víctor.
-Eso nunca toca, pa ti nunca toca- farfulla el presidente canario entre dientes, cruzando los brazos y deslizándose en su silla.
-¿Cómo dices?- replica Sánchez.
-No, nada, presidente.
La breve tensión terminó cuando Sánchez conminó a Torres a mandarle luego «un whatsapp, para que no se me olvide».
El tatuaje de Fernández Mañueco
El reelegido presidente de Castilla y León sorprendió al levantarse de su asiento cuando se llevaba media hora de reunión, bajarse los pantalones y mostrar un tatuaje de un legionario enarbolando la bandera de España, que no dejó de enseñar hasta que estuvo seguro de que el resto de presidentes, especialmente el gallego Núñez Feijoo, lo habían visto. Según se supo luego, tanto el tatuaje como su exhibición era una de las exigencias contenidas en el pacto con Vox para apoyarle en su investidura.
