Los jueces destinados en Gran Canaria tendrán grabadoras de regalo
El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha emitido una nota de prensa en la que califica de «inaceptables» los hechos acaecidos en la sección sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas de Gran Canaria, en los que el juez Salvador Alba «tuvo que emplear una grabadora de su propiedad para registrar sus conversaciones con otros magistrados, en lugar de disponer, como sería lógico, de una grabadora pública a disposición del juzgado». Para el TSJC, éste es «otro signo más de la precariedad en la que desarrolla sus funciones el poder judicial en Canarias».
Por este motivo, el TSJC ha solicitado ya una reunión con el ministro de Justicia Rafael Catalá para exigirle que en los próximos Presupuestos Generales del Estado se incorpore una partida con la que sufragar la compra «de al menos una grabadora por cada dos jueces» de los que están destinados en Gran Canaria. De no atenderse esta petición, la harán también al consejero de Presidencia del Gobierno de Canarias, Aarón Afonso, de quien sospechan que «se está haciendo el sueco en una cuestión que también le afecta».
La intrépida acción del juez Alba, grabando de forma subrepticia sus conversaciones con otros magistrados de la Audiencia en relación a detalles de una pieza del Caso Unión, «ha puesto sobre la mesa las carencias con las que tienen que verse a diario los juzgados en cuanto a material y transparencia», según el TSJC, «una situación terrible que menoscaba la integridad de los jueces en las Islas y su autoridad para impartir justicia».
