Se vuelve antidemócrata tras caerse en su finca

 

El perro de Don Cipriano (su mascota, queremos decir).

Cuando Cipriano Rodríguez, vecino de Granadilla, acudió el pasado lunes a su médico de cabecera, poco podía imaginar que aquel molesto zumbido que le atormentaba desde hacía unos días, después de haberse caído en su finca, iba a situarle en el punto de mira de la comunidad científica.

Este vecino del sur de Tenerife había sufrido un percance cuando, tratando de sortear un muro, resbaló y se golpeó en la cabeza con una piedra,  perdiendo el sentido durante algunos minutos. Aturdido por el golpe, Cipriano había conseguido regresar a su casa y, no teniendo herida visible, había optado por no acudir a su centro de salud a pesar de notar, eso sí, un leve zumbido en ambos oídos. Uno que, aunque ténue al principio, acabó convirtiéndose en una pesadilla insoportable.

Sí, llegué a la consulta -nos comentaba Cipriano-  y le comenté al doctor lo que me había sucedido y el molesto zumbido, como una trompeta o un cornetín, que desde aquel día me perseguía constantemente. Se calmaba un poco durante la noche pero, como un reloj, a las siete de la mañana irrumpía cada día haciéndome
levantar de la cama y continuaba durante el resto del día como una música repetitiva y monótona.

Tras unas primeras pruebas, el diagnóstico fue claro: Cipriano se había dado un fuerte Golpe de Estado, y aquello que escuchaba no era otra cosa que un compendio de llamadas  diversas y marchas militares. El infortunio se había cebado con aquel vecino, de modo que al alba era despertado con un toque de diana y durante el resto del día sufría la reproducción contínua de música militar interpretada por una banda compuesta, según las primeras estimaciones, por entre veinte y treinta y dos músicos.

Es insoportable -nos aseguraba el propio afectado- porque además del contínuo zumbido, ha comenzado a sentir otros efectos secundarios. Yo -proseguía Cipriano- que me consideraba nacionalista desde niño, me estoy encontrando con que tengo ataques de ansiedad que me obligan a adquirir banderas rojigualdas, llaveros con el toro… Incluso estoy ahorrando para comprarme un pasaje a Madrid para irrumpir en el Congreso de los Diputados. Pero eso tardará -nos confesaba- porque este año no me han subido la pensión y la cosa está muy mal. No se donde va a parar esto -continuaba Cipriano-, pero estoy llegando incluso a autocensurarme. Fíjese que incluso el pasado 29M me impedí a mi mismo secundar la huelga.

Aún sin poder asimilar su historia, abandonamos a toda prisa la casa de Cipriano, que desde el umbral de su puerta nos mira con resignación mientras nos grita: ¡se sienten coño!

Cöco De la Emme

昔昔あるところに、名前のない怪物がいました。 怪物は名前が欲しくて欲しくてしかたありませんでした。 そこで怪物は度に出て名前を探すことに出ました。 でも世界は広いので。。。 怪物は二つに別れて度に出ました。 一匹は東へ。もう一匹は西へ。 東へ行った怪物は村を見つけました。 村の入口には鍛冶屋がいました。

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Conectar con Facebook

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para obtener mayor información

The cookie settings on this website are set to "allow cookies" to give you the best browsing experience possible. If you continue to use this website without changing your cookie settings or you click "Accept" below then you are consenting to this.

Close