Siam Park estrena un tobogán que lanza a los bañistas directamente a La Gomera
Siam Park ha estrenado un nuevo tobogán diseñado y orientado para lanzar a los bañistas directamente a La Gomera desde el parque, y que ha sido bautizado como el «Curbelotrón». Los amantes de los parques acuáticos, y en especial aquellos particularmente atraídos por las emociones fuertes, encontrarán ahora un nuevo aliciente para acudir al Siam Park, ya que podrán disfrutar de una atracción de 1920 metros de altura (tiene su salida en la zona de Las Lajas, en Vilaflor) y un ángulo de 45º que les lanzará con la potencia suficiente como para salvar los 40 kilómetros existentes entre Adeje y San Sebastián de La Gomera. El «Curbelotrón» ha sido diseñado por un equipo de ingenieros hispano-alemán, y se estima que, con viento favorable, el bañista podría llegar incluso a Valle Gran Rey.
En una nota remitida a los medios, Siam Park subraya que «esta atracción tendrá un coste especial porque incluye el precio del billete de vuelta en el barco a Tenerife, aunque en estos momentos se está negociando con el Cabildo de La Gomera para subvencionar parte del coste a cambio de la promoción y del aumento del número de visitantes». El Cabildo de la Isla Colombina estudia esta propuesta, aunque desde el Área de Turismo insular se plantean soluciones novedosas para ahorrarse ese coste, como la instalación de una catapulta gigante en el puerto de San Sebastián, milimétricamente enfocada para devolver al bañista a una de las piscinas del Siam Park.
La familia Kiessling asegura que «con el Curbelotrón reforzamos los lazos con La Gomera y establecemos unas interesantes sinergias». Tras la apertura de la nueva atracción «Singha» la semana pasada, y este nuevo tobogán ahora, Siam Park planea para dentro de unos meses una piscina termal con simulacros de tsunamis que podría denominarse «Nemesio’s revenge».
Tanto el presidente regional Fernando Clavijo como el insular Carlos Alonso declinaron participar en la inauguración, mientras que Curbelo ha preferido visitarla más adelante y de forma privada.
